Viajar con la mente.... macarons en Paris

A Carmen y a mi nos encantaría viajar a mil sitios. Siempre que podemos "viajamos con la mente", por países y ciudades,...y uno de los sitios que más ilusión nos haría visitar es Paris.
Viajar 8 personas es un tanto "delicado" en estos momentos, pero estamos seguras de que en un futuro podremos viajar toda la familia a esos lugares especiales. Hasta que llegue ese momento...soñamos
Cuando hemos podido viajar dentro de España, nos has gustado fijarnos en la cultura, en la vida popular y en la gastronomía de cada sitio.
Culturalmente intentamos empaparnos del arte y cultura de monumentos, iglesias, plazas,... Pocos museos todavía por la edad de los peques de casa, pero alguno va cayendo..
Nos encanta la vida popular: callejear, perdernos con un mapa descubriendo lugares escondidos, la vida de los mercadillos con el olor a fruta fresca....
Y, qué decir de la gastronomía.... Ir por esas calles y dejarnos sorprender por tahonas y panaderías pequeñas, "de pueblo", donde todo está hecho a mano y a los que te arrastra el olor a pan desde la calle.
Se nos ilumina la cara  a todos cuando entramos en una de estas tiendecillas. Para que os hagáis una idea de lo golosones que somos, cada vez que viajamos procuramos informarnos del dulce típico del sitio que vamos a ver..o las tapitas típicas, platos del lugar,...ummmm...


Volviendo a Paris...
Como os decía, a Carmen y a mi nos encantaría ir a Paris y una de las cosas que nos gustaría ver son sus tiendecillas de pasteles. Uno de las especialidades parisinas son los macarons. Los pudimos probar cuando mi hermano nos trajo una cajita de Paris y, desde ese día, nos volvemos loquitas por ellos.



Son unos pastelillos pequeños hechos de almendra, azúcar y claras de huevo, básicamente. Van rellenos de varias cremas, pero una de las más típicas es la del ganaché de chocolate.
Yo hice un primer intento de macarons hace unos meses. El relleno no me gustó (no hice ganaché), con lo que he vuelto a intentarlo.
Esta vez he cogido la receta de LADURÉE, de su libro "Sucré. Este pastelero francés es uno de los más prestigiosos del mundo. Sus inicios se remontan a 1862 y sus creaciones se caracterizan por la belleza, calidad y paleta de colores.
Este libro es una de mis joyitas. Su fotografía, sus pastas aterciopeladas  y la cajita en la que viene metido lo hacen muy especial.

Y estos son mis macarons: no consigo poner la foto más grande, pero bueno... os hacéis una ideita

Están  buenísimos y, como veréis, no son perfectos, pero lo importante es seguir intentándolo. Es difícil conseguir ese "pie" del macaron y que el macaron no se agriete, pero, como os digo, aunque en su estética no destaquen ,te lo puedes comer (no ocurre lo mismo con un bizcocho poco hecho, crudo..)

A mis hijos le ha encantado y han volado, literalmente, de la mesa. Esta vez sí que he hecho el ganaché de chocolate de la receta y el resultado es delicioso.
Ya sabéis, si queréis "viajar con la mente" por París, animaos a hacer macarons, veréis qué ricos !!!
¿Qué país visitaremos próximamente Carmen y yo ??


Un abrazo
Cristina