viernes, 7 de junio de 2013

¡VACACIONES EN CONDEMIOS!


Ahora que se acerca el verano me vienen recuerdos de vacaciones pasadas, en especial la del año pasado. Resulta que nos ofrecieron una casita en un pueblo de la sierra de Guadalajara, y para allá que nos fuimos. Creo que me tendrían que haber avisado con mucha antelación de adonde iba porque para empezar el pueblo se llamaba Condemios de Abajo (el pueblo de al lado Condemios de Arriba) que tenía unos 20 habitantes, y en invierno unos 10.! Ah, y la mayoría eran abuelitos..!. Pero la peor parte era que no había cobertura ni internet. Asi que con el pensamiento ''¿qué voy a hacer en Condemios de Abajo durante dos semanas?'' me fui con todos.
La casa era muy mona, como de cuento. Tenía tres pisos, todo de madera pintada  y con mobilario y decoración a juego. Dormíamos de dos en dos, ya que no había camas suficientes, pero bueno, más divertido.
El pueblo tenía cuatro calles que desembocaban en una pequeña plaza donde nos sentábamos al final de la tarde, al venir del paseo. La ''rutina'' era levantarse a una hora normal, desayunar, dar una vuelta, y pasar la mañana con las bicis, leyendo, jugando al escondite ( todo estaba lleno de escondrijos y atajos que hacían el juego más interesante) y por la tarde hacíamos una excursión a un lugar próximo.
Pasando allí dos semanas desconecté de todo, y la verdad me vino muy bien porque aproveché el tiempo para hacer muchas cosas diferentes.
Creemos que no vamos a poder estar ni un día sin internet, que si nos lo quitan se nos cae el mundo, o que no ''sobreviviremos'' pero no, no es así. Es más, incluso te sientes a gusto y ''libre'' como yo, porque te olvidas un poco y descubres que no te es tan necesario como parece. Así que cuando alguien dice que no, que es imposible y que te lo pasarás fatal puedo asegurar que es todo lo contrario.
También en un pueblo perdido se pueden hacer muchas cosas, como ir en bici a visitar los pueblos de al lado o pasarte todo el día investigando todos los sitios. Una anédocta pasó cuando fuimos todos con las bicis a comprar el pan a un pueblo próximo y llegamos a un tramo en el que las vacas se habían metido en la carretera. Entonces nos daba un poco de cosa pasar entre ella porque vistas de cerca eran grandecitas. Así que pasaron los chicos y no pasó nada, pasamos mi madre y yo y ella se paró a hacerle una foto a una de ellas que se giró y empezó a moverse, acabando nosotras corriendo por si acaso. Otra ventaja es que allí puedes moverte con más libertad, al estar en un pueblo de cuatro calles y al no pasar coches. También, no tienes que ir en coche a todas partes, sino que vas andando.
Así que, a la hora de ver el sitio de veraneo pensad que también está bien un poco de cambio en todos los aspectos.

Carmen




6 comentarios:

  1. Я люблю его, так держать.
    Sacha.

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  2. Me alegro de que te guste Sacha
    Un beso, Carmen.

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  3. Qué ganas de vacaciones, Carmen !!
    El nombre del pueblo no es muy atrayente, pero viendo la casa y los planes que hacéis allí, todo cambia !!
    Un beso fuerte.
    Pedro

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  4. Si, apetece mucho! es misma idea tenía yo pero al final estuvo muy bien, es verdad, todo cambia!!!
    Un beso fuerte
    Carmen

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  5. ¡¡No me lo puedo creer!!Pero si este fin de semana hemos estado en una casa rural en Condemios y al ojear tu blog ahí está...¡Que casualidades te da la vida!

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    Respuestas
    1. Ay, qué casualidad!!! En Condemios de Abajo, en la Casa del Gato, has estado?? Al ladito estaba la casa que nos dejaron. A qué es un pueblo adorable para descansar?Qué bueno, de verdad!!!

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